miércoles, 04 de diciembre de 2024
Biblioteca de Silos. Bernardo andando

Volver un paso atrás Escuchar el texto más menos Enviar por email Imprimir

33. La propiedad.

A nadie se le permita tener nada.
     1 Por encima de todo en el monasterio se debe arrancar de raíz el vicio 2 de que alguno se atreva a dar o recibir nada sin permiso del abad, 3 ni tener nada, absolutamente nada, en propiedad: ni un libro, ni papel, ni pluma, nada absolutamente, 4 puesto que no pueden disponer ni de su cuerpo ni de su voluntad. 5 Todo lo que necesiten deben esperarlo del padre del monasterio. Y a nadie se permita tener nada que no le haya dado o autorizado el abad. 6 Lo poseían todo en común, está escrito. Y nadie diga que algo es suyo, ni se lo imagine. 7 Si se ve que alguien se entrega a este nefasto vicio, le advertirán hasta dos veces. 8 Si no se enmienda, se le reprenderá.


« 32. Las herramientas. 34. Recibir lo necesario. »